Esclavo en tu mirada

Quiero beber la vida en tu boca
Mojar mis labios en el rocío de tu piel
Detrás de tus cabellos se duerme la tarde
Y en tus pupilas se esconde mi ser…

Calmaría la fuerza de los mares,
La tempestad de tu mirada.
Apagaría con el rose de tus labios suaves,
La sed que en los míos se halla.

Viviría solo un siglo o más
Si inspiraras la eternidad de mi amor,
Y en la invasión de tristeza
La alegría que sale de tu sonrisa
A mi vida le daría valor…

No hay otra forma para decir que te quiero
Porque débil es mi corazón,
En cada verso expreso lo que ciento
En cada poema te prometo mi amor…

Mis manos serán barcos a la deriva
Que a oscuras naufragarán en tus cabellos,
Mi aire se mezclará con tus suspiros
Y en tu corazón mi amor anclará…

Viviría tatuado a tu cuerpo
Y de tu piel lamería el amor…
En tus ojos se duerme la noche
Y desprenden tus pupilas mi luz…

Quiero vivir en tu mirada
Porque en tu pecho se duerme mi amor,
Quiero la luz de tus ojos
Y de tus brazos quiero el calor
Quiero ofrecerte mi vida
Y ser luego tu esclavo de amor…

Recuerdos

Te amo
Porque de tu mirada nacen todas mis ilusiones
y de mí tu sonrisa me hace ajeno.
Pero estás tú y un gesto de hipocresía
Que adormece los pensamientos,
que me roba toda felicidad…

Porque sin ti no sé vivir
y esa sonrisa me mata la esperanza,
toda oportunidad de vida
Que un coraje tierno regaló,
Apostando su sangre por amor
Y la balas de plata en el corazón…

Ya tus labios, hoy no dan vida,
Hoy me quitan la respiración
al saber que lo que viene de tu boca no es para mi,
al saber que aun deseo todo lo que venga de tu piel…

Aún deseo ser parte de ti,
de un día de alegría,
de una tarde en tu compañía,
de aquella noche que es testigo,
de mi amor por ti eh prometido.
Y que los años juzguen
que sin ti no se vivir...

Que juzgue también tu alma el alma mía
que cuando me miras a los ojos
en el brillo solo vez tu reflejo,
que de ti aprendí a odiar,
de ti aprendí a amar…

Que tiemblo cuando estás conmigo,
que soy frágil si tú no estas,
y si tú no estas yo muero
por que vivo para amarte
y solo a ti aprendí a hacerlo…

Estabas parada tú en una roca,
yo de lejos te observaba
y en una fotografía,
en mi mente y en mi bolsillo te guardaba...

Te robé varios recuerdos que hoy sólo yo conservo.
Por que al habértelos robado, ya de mí te has olvidado,
por que al parecer no hay deuda alguna,
yo te robé los recuerdos y tú te robaste mis manos...
yo algún día te robé una sonrisa y tú siempre te robabas mi corazón...